Buscar este blog

Pestañas (Basta con pasar el ratón)

jueves, 19 de octubre de 2017

7-El corazón de una sombra asesina

Hong Kong, 14 de abril de 2015.
Mientras los cuatro se dirigían hacia R, saltando por las azoteas, Musha se acordó del sable de Aleix.
—Por cierto, Aleix—empezó la sombra,—ese sable tuyo...
—Te refieres a la Daga Maldita—contestó al acto,—era algo que encontré, antes dependiendo del corazón que tuviese su portador, cobraba una forma u otra, ahora solos e activa con un corazón puro, el color depende del usuario. ¿Por qué preguntas?
—Creo que lo he visto antes—contestó Musha.
Aleix le pasó le pasó la daga a Ghost.
—Frota el rubí con tu pulgar—le dijo.
Ghost hizo caso, el sable se abrió mostrando su hoja llameante habitual, pero no era amarilla y roja, sino blanca y plateada. Ghost hizo el mismo gesto para apagar el sable y se lo pasó a Sufvil, el cual tuvo el mismo resultado con colores naranja claro y oscuro. Luego se la pasó a Musha.
—Soy un asesino—dijo Musha mirando la daga,—sobre mi responsabilidad cayeron siete mil millones de víctimas, creo que eso define cómo soy—diciendo esto le devolvió la daga a su dueño,—preparaos, estamos cerca.
Al poco, los cuatro aterrizaron en una azotea, en la que estaba R y una bestia única, el Total Crymon. La bestia era un esqueleto con cola y alas hecho de hierro a excepción de las manos, que eran de diamante, toda la figura ósea era transparente que sangraba por pocos lugares y que estaba cubierta por una masa de agua que era negra como las sombras a excepción de las alas, que desprendían una luz blanca, y de las manos, que emitían plasma. Sus ojos era dos esferas de láser y, a excepción de las alas, le cubría un aura de fuego. Cuando caminaba, no solo hacía que los objetos de alrededor girasen en torno a ésta como un sistema solar, sino que dejaba un rastro de sangre, sangre que al tocar el suelo, se evaporaba como si no hubiera estado allí.
—Aleix, veo que tienes amigos, y un traidor entre ellos—dijo R,—pero no importa, porque...
—Tienes una mascota que parece un zurullo en una cañería—dijo Musha.
—Vaya, así que tú eres Musha, he oído que te han enviado para detenerme—dijo R,—no pareces gran cosa.
—Si bajas de tu noria, verás quien es mas alto—se la devolvió Musha.
—También tienes al príncipe de los apiros. Un equipo de perdedores—terminó R.
—Sigue hablando de esa formo—volvió Musha,—a este pasó serás tu quien pierda, me refiero a la cabeza.
—Os dejo que juguéis un rato, yo tengo asuntos que atender—dijo R. Al acto se marchó.
—Id tras él, yo me encargo de esto—dijo Musha a los demás.
—¿Estás seguro?—pregunto Aleix.
—Ahora os alcanzo—contestó.
Aleix, Ghost y Sufvil se marcharon. La bestia empezó a correr hacia Musha al mismo tiempo que este levantaba su brazo izquierdo formando una L con el índice y el pulgar, entre los ejes que formaban sus dedos veía a Total Crymon acercarse. Musha cerró su mano derecha y la puso sobre los dos dedos que antes había extendido, luego retrocedió el brazo derecho, como si fuese un arquero tensando el arco.
True Arrow Punch—dijo Musha.
En ese momento, Musha tenía su brazo derecho atravesando a la bestia. Mientras el agua y la sangre eran derramadas, y esta vez la sangre no se evaporaba, la luz de sus alas se apagó, el plasma y e el fuego hicieron lo mismo, sus huesos se agrietaban de forma celular que empezaba a parecer polvo...Total Crymon fue destruido por el sombra.
—Si hubieses tenido alma, habrías durado más—dijo Musha a los restos de la bestia.
Musha empezó a ir en la dirección que habían tomado sus nuevos compañeros. Al cabo de poco tiempo, vio en una azotea a Aleix, tirado en el suelo, con una herida grave en el pecho.
—Aleix, ¿que ha pasado?—le preguntó.
—Le seguimos hasta quí, donde desapareció, al acto reapareció atravesándome el pecho, golpeó a Sufvil enviándole muy lejos Ghost le agarró e hizo explotar su avatar, para proporcionar daños a R y volver a nuestro mundo para encerrarlo mientras él sigue aquí. Ahora debe estar cerca reponiéndose.
En ese momento, R apareció, atravesando a Musha por completo. Cuando se vio a unos metros por delante y a Musha intacto, le preguntó:
—¿Cómo no estas malherido en el suelo?, te he atravesado.
—Soy un ser hecho de oscuridad, te será difícil cortarme—le contestó Musha.
—Empiezo a entender cómo pudiste con Crymon—le alagó R.
En ese momento, Musha y R empezaron un tremendo combate marcado por sus técnicas físicas. El combate duró bastante. Sufvil había vuelto mientras duraba. El combate terminó con R quitándole las gafas a Musha e impactando una esfera de luz en sus ojos. Eso hizo caer a Musha. El impacto con la azotea le hizo notar que tenía la daga maldita bajo su mano derecha.
—Eres duro, pero ahora, seas humano o no, quedarás ciego para siempre—dijo R,—y eso me da ventaja.
Musha agarró la daga, y sin querer acarició el rubí de la empuñadura. En ese momento se encendió la hoja de sable llameante, marcando colores blancos y negros.
—Imposible—dijo Sufvil.
—Si eres un asesino, ¿cómo puedes encender esa daga?, tu corazón no es puro—dijo R frustrado.
En ese momento, Aleix dejo ir una pequeña risa.
—¿De qué te ríes?—le preguntó R.
—Aunque se parezcan, hay diferencia entre un corazón impuro y un corazón traumatizado—contestó Aleix,—Sufvil, déjaselo a Musha, tú encárgate de alejar a la gente para que no corra daños, algo me dice que la batalla será muy destructiva.


Continuará.

No hay comentarios:

Publicar un comentario